La alimentación en personas mayores, juega un papel fundamental en su salud. A cualquier edad es muy importante mantener una dieta adecuada, conseguir un descanso satisfactorio, realizar ejercicio físico de manera adecuada, eliminar los hábitos tóxicos y seguir las pautas adecuadas de medicación.
Es importante diferenciar entre alimentación y nutrición en personas mayores, para centrarnos en la primera.
¿De qué hablamos cuando nos referimos a alimentación en personas mayores?
La alimentación en personas mayores y personas a cualquier edad, es la manera de proporcionar al cuerpo los alimentos que son necesarios.
¿Qué es la nutrición?
La nutrición es el conjunto de procesos y transformaciones que sufren los alimentos en el organismo hasta llegar a su completa asimilación.
Destacar que en ausencia de enfermedad, una buena alimentación conduce a una buena nutrición.
Os dejamos algunas recomendaciones para la alimentación en personas mayores:
- Las personas mayores suelen ver reducidas sus necesidades energéticas, por lo que el consumo de calorías en a dieta debe ser el adecuado.
- El consumo de agua debe ser un litro y medio al día, como mínimo.
- Debe limitarse el uso de sal en comidas.
- Racionalizar el consumo de bebidas alcohólicas.
- La dieta debe ser atractiva.
- Cuidar el entorno, para que sea agradable.
Una adecuada alimentación en personas mayores, combinada con ejercicio físico adaptado a cada persona, ayuda a mantener un estilo de vida saludable que se reflejará en su calidad de vida.
Si la persona mayor cuenta con apoyo en casa, es importante que la persona que cocine tenga en cuenta las siguientes normas generales para preparar una comida:
- Es importante contemplar el menú diario en conjunto, tratando de equilibrar todas las comidas del día ( desde el desayuno a la cena).
- Combinar platos fuertes con platos ligeros.
- Distribuir las proteínas a lo largo de todo el día.
- Evitar, en la medida de lo posible la repetición de platos ricos en hidratos de carbono.
- Calcular las cantidades de alimento de acuerdo a las necesidades nutricionales de la persona.
Hay personas mayores o en situación de dependencia, que pueden sufrir disfagia.
¿Qué es la disfagia?
La disfagia es la dificultad de tragar y puede sufrirla cualquier persona, pero que nosotros nos estamos centrando en las personas que acompañamos en domicilios.
Si una persona sufre disfagia será necesario que la profesional del hogar o el cuidador familiar siga las pautas indicadas por el profesional experto, tanto en textura, cantidad, forma de dar de comer, etc.
Las pautas para una adecuada alimentación y nutrición para personas mayores deberán ser ofrecidas por un profesional de la nutrición, que guíe y asesore a la familia y cuidadores en casa.
Es importante diferenciar entre alimentación y nutrición en personas mayores, para centrarnos en la primera.